Javier Herrero nos ha regalado esta magnífica reseña, publicada en la edición del 4 al 11 de abril del Periódico de la Publicidad.
.
«Botchan»
A algunos les recuerda a El guardián entre el centeno de J. D. Salinger. Pero la narración de Natsume Soseki (1867-1916) deambula por otros cauces. Ni el tiempo ni el lugar permiten comparar a los protagonistas de ambas novelas, aunque ambos renieguen del entorno social en el que tienen que vivir. Si en la obra de Salinger, Holden Caulfield (con 16 años) representa la ansiedad de la adolescencia en su despertar al sexo y a la madurez, Botchan, la primera novela de Soseki, escrita en 1906, describe las experiencias de un joven profesor (21 años y alter-ego del autor) cuando llega a una pequeña población y se topa con el provincianismo en el que viven, con los prejuicios que les atenazan y las dificultades con las que se enfrenta para poder ejercer su incipiente profesión de la forma que él considera correcta. Aún así, el inconformismo de Botchan con lo que le rodea hace que la comparación con el personaje de Salinger sea inevitable. Siempre y cuando no se olviden las referencias culturales, claro. Botchan habita en el Japón de la época del imperio, cuando la guerra ruso-japonesa era el acontecimiento que marcaba toda la vida del país. Un país que todavía no había abandonado su larga tradición feudal y que se enfrentaba a unos tiempos modernos que entraban royéndolo todo como la carcoma a la madera.
escritores más
importantes de la
literatura japonesa
del siglo XX, de
obligado estudio
en las escuelas»
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario